La innovación necesaria en la Vivienda Social
Phoenix Commotion es una compañía cuyo principal objetivo es ayudar al sueño de muchos en conseguir una casa verde y lo más barata posible. La empresa es propiedad del matrimonio Dan y Marsha Phillips, y construye viviendas a bajo costo a partir de materiales muchas veces inimaginables que pudieran tener una utilidad constructiva. Dan no descarta nunca nada, para él cualquier cosa duradera es firme candidata, por eso admite todo tipo de donaciones en forma de chatarra, de una amplia gama de fuentes. Desde 1997 hasta ahora, la empresa ha construido decenas de casas para hogares con bajos ingresos, y los materiales generalmente utilizados son fragmentos cerámicos, ladrillos, restos de maderas, envases de vidrio, corchos de botellas de vino, e incluso viejos DVDs. El 80% de los materiales con los que construyen las casas provienen de otros proyectos de construcción, de tachos de basura, o del costado de las rutas. A Philips siempre le chocó ver rellenos sanitarios repletos de materiales de construcción descartados, más aún cuando el acceso a viviendas es caro.
Para realizar viviendas económicas no se necesita incumplir las Ordenanzas
Dan se encarga de que las casas cumplan todos los códigos locales de construcción, por eso consulta a ingenieros y especialistas, para que lo asesoren en la construcción y asegurarse que sus diseños son adecuados en este sentido. Esto aumenta el grado de confiabilidad de las viviendas. De hecho, es él quien se ha convertido en referencia. En 2004 los funcionarios de la ciudad le pidieron asesoramiento para crear un almacén de materiales de construcción reciclados donde los constructores, equipos de demolición y fabricantes pueden donar materiales en lugar de tirarlos en el vertedero de turno.
Su empresa de construcción contrata a alrededor de cinco trabajadores. Ellos están, generalmente, poco capacitados. La idea es que, construyendo viviendas, adquieran distintas habilidades, para luego poder lanzarse al mercado de trabajo con más herramientas. Además, los futuros habitantes de la casa se involucran en el proceso, ya que deben colaborar con la construcción.
Un proyecto fascinante que combina varios beneficios: la reducción de la cantidad de basura enviada a rellenos sanitarios, la fabricación de viviendas accesibles, y la capacitación para el empleo.